top of page

Escribir una lista de propósitos de año nuevo y llevarlos a cabo es posible si lo haces así.

Un nuevo año se avecina, y esto suele traer cambios, o por lo menos, el deseo de llevarlos a cabo.


¿Cuántas veces nos ha pasado que, al empezar enero, elaboramos una larga lista de propósitos para cumplir durante el año, y, conforme va pasando el tiempo, los vamos dejando de lado? Porque no conseguimos encajarlos en nuestra rutina, porque nos sentimos desmotivados o porque no sabemos cómo ponerlos en práctica.


Debemos saber que, un propósito implica realizar cambios en nuestra rutina. Esto no es nada fácil, y aún más difícil es mantener esas conductas durante tiempo. Por ello, en este artículo te voy a contar cómo podemos hacer para elaborar una lista de propósitos, ajustada a nuestro día a día y cómo incorporarlos en nuestro día a día.


Lo primero para elaborar nuestra lista de propósitos, es tener en cuenta desde dónde los hacemos: ¿queremos ir al gimnasio porque estar en forma es realmente una motivación para nosotros o porque es un mensaje impuesto por el entorno? Por tanto, es muy importante que estos propósitos nazcan de nosotros y no sean impuestos.


Imaginamos que llevamos una rutina en la que nos cargamos con muchas responsabilidades del trabajo, de la casa o de nuestra familia, y esto nos está generando mucho estrés, vamos a ver cómo elaborar un propósito e implementarlo. Para ello, nos ayudaremos de los siguientes pasos:


  1. Definir lo que queremos conseguir o cambiar: En este caso, dejar de responsabilizarnos en exceso.

  2. Proponer ideas sobre cómo hacerlo: Aprender a expresar mis necesidades y mis límites, comunicarme asertivamente; acudir a un psicólogo para trabajar estas habilidades.

  3. Evaluar cuáles de estas ideas me pueden ser útiles.

  4. Aplicar las alternativas válidas: Por ejemplo, poner límites a mi familia cuando invaden mi intimidad, delegar responsabilidades en mi trabajo que no corresponden a las tareas de mi puesto.


Hay que tener en cuenta, que al ser algo nuevo, es probable que haya días que nos sintamos raros haciéndolo, que tendamos a volver a nuestra antigua rutina o que nos sintamos poco motivados, sin embargo, es importante que en estos días continúenos con nuestros cambios, puesto que, estos nos van a llevar a resultados beneficiosos para nosotros, y estos resultados son los que generan la motivación necesaria para implantarlos como hábito de nuestro día a día.

186 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo
bottom of page