¿Cómo es el proceso de un tratamiento con EMDR?
El abordaje con EMDR comienza siempre con unas sesiones de evaluación. En ellas recogemos información importante sobre tu historia, los síntomas que estás viviendo y cómo han ido marcando tu vida.
A partir de ahí, trabajamos una fase de preparación y estabilización emocional. Este paso es esencial antes de acercarnos a experiencias difíciles: aquí podrás comprender mejor qué te ocurre, reconocer tus propios recursos, aprender herramientas de autocuidado y sentirte con la seguridad suficiente para continuar con el proceso.
Cuando estés preparada/o, iremos definiendo de manera conjunta los temas a trabajar (targets). Cada recuerdo relevante se explora teniendo en cuenta la imagen que lo representa, la creencia negativa que lo acompaña y las emociones y sensaciones físicas que se activan. Junto a esto, se elige una creencia positiva que simbolice el cambio de perspectiva que deseas alcanzar respecto a esa experiencia.
De esta forma, el proceso se va desarrollando de manera progresiva, respetando tus tiempos y tus necesidades, y ofreciendo un marco seguro para que el trabajo terapéutico pueda tener lugar.