Tristeza y ansiedad en verano: ¿por qué ocurren?

account_circle Teresa Rodríguez
02 de julio de 2025

Tristeza y ansiedad en verano: ¿por qué ocurren?

¿Tristeza en verano? Aunque parezca contradictorio, sí, también es posible sentirse mal durante esta época. A este fenómeno se le llama trastorno afectivo estacional de patrón de verano. Y aunque solemos asociar el verano con felicidad, descanso y diversión, no todas las personas lo viven así.

La publicidad, las redes sociales y hasta nuestros círculos cercanos nos bombardean con mensajes que afirman que «el verano es para disfrutar», pero… ¿qué pasa si no te sientes feliz? Quizá has perdido a alguien, has sido despedido, no tienes vacaciones o estás atravesando un episodio depresivo. O, simplemente, no sabes por qué, pero te sientes triste. Eso también es válido y merece atención.

¿Por qué puede aparecer la tristeza o ansiedad en verano?

El verano genera un contraste emocional muy fuerte para quien no lo está disfrutando. Además, puede traer consigo cambios en la rutina, exposición social excesiva o presión externa para estar bien. Esto puede aumentar síntomas de ansiedad y depresión.

Señales de que podrías estar sufriendo un trastorno afectivo estacional en verano

1. Alteraciones del sueño

El calor, los horarios cambiantes y la falta de rutinas pueden afectar tu descanso, y eso tiene un impacto directo en tu salud mental.

2. Cambios en la rutina

Los días son más largos, las actividades se multiplican y eso puede generar desorden emocional. Para muchas personas, esto se traduce en ansiedad o sensación de no tener control.

3. Aislamiento social

Cuando no puedes seguir el ritmo de planes sociales o no te sientes bien emocionalmente, es común que empieces a evitar eventos. Pero esto puede provocar más tristeza y soledad. También afecta a quienes no tienen una red social fuerte.

4. Presión por hacer planes o viajar

Existe una idea generalizada de que, si no estás haciendo algo «épico» en verano, estás desaprovechando tu vida. Esta presión afecta especialmente a personas con ansiedad, depresión o dificultades económicas.

5. Comparaciones en redes sociales

A diferencia de la televisión, las redes sociales muestran a «personas reales», lo que refuerza la comparación negativa. Vemos vidas «perfectas» en lugares paradisíacos y sentimos que nuestra experiencia no es suficiente. Esto alimenta el malestar emocional.

¿Qué puedo hacer si me siento así?

1. Acepta tus emociones

No luches contra lo que sientes solo porque «deberías estar bien». Si estás triste o ansioso/a, valídalo. Comenzar un proceso terapéutico puede ayudarte a entenderte y a trabajar sobre lo que hay debajo de ese malestar.

2. Prioriza el autocuidado

No todos los planes sociales te van a hacer bien. Crea espacio para actividades que cuiden de tu cuerpo, tus emociones y tus relaciones de forma saludable. El autocuidado no siempre es hacer más, a veces es hacer menos y hacerlo con más consciencia.

3. Mantente conectado emocionalmente

Aislarte puede parecer una solución a corto plazo, pero aumenta el malestar con el tiempo. Intenta mantener el contacto con personas que te hagan sentir cómodo/a, sin exigencias. Elige planes tranquilos y con gente con la que te sientas tú misma/o.

Conclusión: no tienes que estar bien solo porque es verano

El verano no garantiza felicidad. Si estás atravesando un mal momento, es importante que no minimices tu sufrimiento solo porque es una estación asociada a la alegría. Tu dolor es válido y merece ser atendido.

Buscar ayuda psicológica no es un signo de debilidad, sino un acto de autocuidado.

En North Psicólogos contamos con especialistas en depresión, ansiedad y trastornos emocionales que te acompañarán en este proceso.
No tienes que esperar al invierno para sentirte mejor. El momento para empezar a cuidarte es ahora.

Contáctanos y empieza a construir un verano más amable contigo misma/o.